1. Residuos y Desechos Sólidos
·
Establecer nuevas plantas de transferencia, que contribuyan con el manejo
apropiado de los desechos, como punto intermedio entre los sitios de
recolección y centros de disposición final.
· Dotar
a las ciudades con la infraestructura apropiada para manejar sus residuos y
desechos, incluyendo sistemas que permitan separar desde la fuente aquellos que
puedan ser reciclados o requieran un tratamiento especial. Asimismo, deberían
incluirse sistemas de transporte apropiados, con personal debidamente
capacitado, plantas de transferencia bien equipadas y rellenos sanitarios
diseñados y administrados con estrictos criterios técnicos y ambientales.
·
Establecer una estructura operativa funcional que fomente la reducción,
reutilización y reciclaje de residuos sólidos a nivel nacional, tanto a nivel
urbano como rural. Las empresas privadas deben incrementar su capacidad para
recolectar y tratar los residuos, y el gobierno nacional debe evaluar el
establecimiento de incentivos con ese objetivo.
·
Manejar los residuos y desechos de acuerdo con su naturaleza (doméstica,
industrial, agrícola, hospitalaria, tóxica y peligrosa, entre otros),
garantizando que los mismos se gestionen sin poner en peligro la salud y el
ambiente, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos.
·
Iniciar un programa masivo de reciclaje municipal, comenzando por residuos
orgánicos e inorgánicos en una primera etapa, para luego ir contemplando otros
residuos, disminuyendo la cantidad de materiales que son depositados en
rellenos sanitarios sin promover su aprovechamiento.
·
Reglamentar la Ley de Gestión Integral de la Basura, y actualizar las normas
técnicas que servirían de soporte en materia técnica, legal y penal.
·
Desarrollar ordenanzas que permitan sensibilizar, persuadir y hasta penalizar
de conformidad con la Ley Penal del Ambiente, a aquellos usuarios y usuarias
reincidentes en hechos relacionados con la mala disposición y/o manejo de
residuos. La contraloría social es fundamental en este aspecto, así como una
gestión oficial coordinada y transparente con otros niveles e instancias del
estado.
·
Fortalecer a los Jueces de Paz o a los Tribunales del Municipio en la materia
anterior, para descongestionar la jurisdicción penal ordinaria.
·
Realizar de manera transparente, y basado en criterios de experiencia técnica
comprobada, la asignación y administración de las concesiones en el manejo de
los residuos y desechos sólidos, garantizando el cumplimiento de las
contrataciones y asegurando un servicio de calidad.
2.
Biodiversidad
·
Promover la permanente actualización de los inventarios de flora, fauna,
paisajes y ecosistemas, patrimonio natural de todos los venezolanos, con miras
a valorar el ambiente y sus necesidades de conservación. La Contraloría General
de la República debe considerar que, en sus inventarios de bienes y servicios
del país, los recursos naturales, activos y pasivos, deben ser incluidos en las
cuentas nacionales.
·
Promover la aplicación de la estrategia de conservación de la biodiversidad y
su plan de acción, impulsando su debida actualización con la participación de
los principales actores en la materia.
·
Controlar el comercio ilegal de animales y plantas silvestres, en particular en
las carreteras nacionales en las cuales pareciera ser una práctica habitual.
Estas acciones pueden complementarse mediante un intenso programa de educación
de la población en general para combatir el comercio ilegal de aves de canto y
ornato, orquídeas, bromelias, mamíferos para mascotas como monos y perezas,
además carnes de cacería en restaurantes y centros gastronómicos.
·
Promover la realización de eventos científicos de amplio alcance y alto nivel,
con profesionales de todo el país, a los fines de intercambiar información
sobre biodiversidad fundamental para su valoración, conservación y manejo, y
emprender acciones conjuntas entre los principales actores para completar los
vacíos que pudieran existir por taxones o grupos claves de especies.
3.
Ordenación
y Ocupación del Territorio
·
Prohibir y/o eliminar la ocupación del territorio en zonas inestables y
proponer soluciones habitacionales seguras y ecoeficientes. Los riesgos de
inundaciones y/o deslaves están siempre presentes y deben ser atendidos con
responsabilidad, incluyendo la educación preventiva en situación de sismos,
tormentas y otros fenómenos naturales.
·
Propiciar la desconcentración de los centros urbanos y centros industriales con
mayores problemas ambientales, creando las condiciones necesarias para que la
migración dirigida contemple una mejora en las condiciones de vida de los
ciudadanos, incluyendo todos los servicios básicos requeridos, y los servicios
públicos administrativos que sólo suelen concentrarse en las principales
ciudades.
·
Controlar las invasiones, en particular dentro de áreas protegidas, que atentan
contra la preservación de los procesos ecológicos esenciales, sus fenómenos
evolutivos, y la flora, la fauna y el paisaje en general.
4.
Agua
·
Elaborar y promulgar el reglamento a la Ley de Aguas, basado en una amplia y
sustantiva consulta a todos los sectores de la sociedad venezolana,
comprometidas con los temas ambientales.
·
Impulsar la construcción y puesta en funcionamiento de plantas de tratamiento
de aguas servidas a nivel municipal, con miras a disminuir el impacto que las
aguas residuales ocasionan sobre los distintos cuerpos de agua del país. Los
esfuerzos adelantados por las autoridades a nivel nacional lucen insuficientes
y deben ser fortalecidos.
·
Desarrollar programas técnicos de control de la calidad de los cuerpos de agua
del país, pues en la actualidad los mismos se concentran fundamentalmente en
las playas y balnearios de ríos y lagos, sólo en temporadas vacacionales,
cuando deberían desarrollarse programas intensivos en ríos, riachuelos, lagos y
lagunas de todo el país y durante todo el año.
·
Promover la gestión integrada de los recursos hídricos, a fin de sistematizar
el desarrollo, asignación y monitoreo del uso del agua, en el contexto de los
objetivos sociales, económicos y ambientales. Especial énfasis debe hacerse en
la función predictiva y de gestión que asegure la inversión necesaria para su
mantenimiento y desarrollo, así como también en el diseño, planificación y
aplicación de los fondos de agua.
·
Fortalecer el manejo de las cuencas hidrográficas como la instancia fundamental
de la gestión de los recursos hídricos del país, por medio de planes
estratégicos y operativos debidamente consensuados con los principales actores,
contando con la tecnología necesaria para su seguimiento a nivel ecorregional,
especialmente para monitorear su caudal y calidad.
·
Impulsar nuevas formas de aprovechar el agua, realizando las inversiones
necesarias para modernizar los sistemas de transporte y distribución, a fin de
evitar pérdidas y tomas ilegales.
5.
Educación
y concienciación ambiental
·
Impulsar el desarrollo de campañas de sensibilización e información ambiental
que contribuyan a valorar el agua y la energía, a fin de reducir el consumo
excesivo de ambos recursos.
·
Promover la educación de la ciudadanía para valorar la importancia de un buen
manejo de los residuos, disminuyendo la generación desde la fuente, reciclando
tanto como sea posible y disponiendo apropiadamente los residuos y desechos,
para su debido tratamiento por las instancias competentes. Asimismo se propone
impulsar programas de clasificación selectiva de residuos desde los
condominios, y desarrollo de programas municipales masivos en coordinación con
las Asociaciones de Vecinos y los Consejos Comunales.
·
Promover y empoderar la organización y la participación ciudadana a fin de
fortalecer la contraloría social de la gestión ambiental. Ciudadanos altamente
sensibilizados, formados e informados, podrán impulsar un comportamiento más
responsable de las autoridades, las empresas, los medios de comunicación y la
comunidad en general.
·
Promover la activa participación de los consejos comunales y las asociaciones
de vecinos en la gestión ambiental como entes fundamentales de la contraloría
social, hacia una administración transparente y compartida, donde se estimule y
premie a los funcionarios capaces y responsables, se penalice a los culpables y
se documenten las infracciones en forma permanente y ejemplarizante, en fiel
cumplimiento a lo establecido en la Ley Penal del Ambiente vigente.
·
Promover una mayor participación de las comunidades no organizadas en mesas de
trabajo para la solución de sus principales problemas ambientales, y las
acciones en defensa de su entorno saludable que pueden ser emprendidas desde el
hogar, la escuela o el trabajo. El fortalecimiento de la labor de las
parroquias y los municipios en esta materia es fundamental.
·
Promover una educación ambiental orientada a disminuir el consumo de bienes y
servicios, formando valores, conocimientos y conductas, cónsonos con la
conservación ambiental y el desarrollo sustentable.
·
Asignar personal y profesionales expertos en la materia ambiental, en las
instituciones promotoras y divulgadoras de programas ambientales.
6.
Ecoeficiencia
·
Impulsar los planes y programas de adecuación ambiental de los sectores de la
pequeña, mediana y gran industria, públicos y privados, a los fines de promover
la adopción de mecanismos de producción y desarrollo limpios.
·
Desarrollar programas de ecoeficiencia orientados a promover una cultura
administrativa en la que se haga un uso racional del agua y la energía, y se
disminuya de manera significativa la generación de residuos. Esto puede
aplicarse desde un condominio y hasta un organismo público o una empresa.
· Impulsar
la construcción de viviendas con criterios de sustentabilidad, que combinen
materiales de gran durabilidad, resistencia y bajo costo, e incentiven el uso
de la luz y la ventilación natural, el ahorro en el consumo del agua y la
energía, y el manejo apropiado de los residuos sólidos que genere su
construcción, ocupación, adecuaciones en uso o demolición- transformación, al
final de su vida útil.
7.
Energía
y Transporte
·
Continuar los programas de ahorro energético, impulsando la creación de mesas
técnicas que permitan a los ciudadanos expresar sus ideas e inquietudes y
llegar a consensos, incluyendo a los sectores productivo, académico, ONG y
medios de comunicación social. Los programas de ahorro deben diseñarse e
instaurarse en coordinación con los principales actores, sin comprometer el
crecimiento y desarrollo de la economía, y la atención de las necesidades
básicas de la población.
·
Impulsar el uso de energías alternativas o verdes, disminuyendo el uso de
sistemas de generación energética altamente contaminantes, basados en
combustibles fósiles. Evitar el uso de la energía nuclear, que aunque puede
considerarse limpia, el manejo de sus residuos y desechos contemplan acciones y
metodologías que requieren estrictos controles, debido a su alta peligrosidad. · Mejorar las condiciones del
transporte público actual, cuyo parque automotor tiene en promedio 15 años, y
muchos de los cuales no cuentan con los sistemas de mantenimiento apropiados,
generando emisiones y ruidos molestos, entre otros problemas.
·
Promover la creación y desarrollo de sistemas masivos de transporte impulsados
por energías limpias, evitando la generación de toneladas de gases que
contribuyen al incremento del efecto invernadero y que por lo tanto permitan
mitigar la congestión de las vías públicas por la creciente densidad vehicular.
·
Evaluar alternativas para descongestionar el tráfico de las principales
ciudades del país, mediante el establecimiento de canales de flujo y contra
flujo, planes de parada selectiva por día y placa, uso compartido de vehículos
y uso de horarios escalonados para favorecer la descongestión del tránsito
terrestre.
·
Continuar y fortalecer el programa de reconversión vehicular a gas, masificando
los sistemas de distribución del combustible que siguen siendo escasos en las
principales ciudades.
8.
Financiamiento
· Crear
el Fondo Nacional del Ambiente, con aportes públicos y privados, que permita el
desarrollo de proyectos y programas locales, regionales y nacionales, con la
activa participación de la ciudadanía, las ONG, las universidades y las
empresas e instituciones del gobierno. Este fondo debería ser administrado de
forma independiente, mediante la creación de un consorcio creado para tal fin,
y que pueda ser auditado por entes externos a la institución.
· Asignar
un presupuesto justo para la gestión ambiental in situ, en particular para el
manejo y conservación de las áreas protegidas, a fin de que Parques Nacionales,
Monumentos Naturales y Refugios de Fauna Silvestre, cumplan con los objetivos
de su creación, es decir, la preservación de la flora, la fauna, los paisajes,
las fuentes de agua y los demás bienes y servicios ambientales, fundamentales
para el desarrollo sustentable del país.
·
Generar mecanismos autosustentables para los centros de conservación ex situ
como Jardines Botánicos, Zoológicos y Acuarios, que garanticen el desarrollo de
programas de cría o reproducción en condiciones controladas, además de asegurar
espacios para el desarrollo de iniciativas educativas y recreativas para la
ciudadanía.
·
Impulsar la creación de incentivos positivos a la conservación, mediante el
desarrollo de tasas o impuestos a algunas actividades capaces de degradar el
ambiente, o de estímulos fiscales a quienes desarrollan programas ambientales
por encima de las normas establecidas.
9.
Legislación
Ambiental
·
Actualizar aquellas leyes ambientales que requieran una revisión técnica por el
tiempo que ha transcurrido desde su declaratoria. Un cuadro resumen sobre esta
materia ha sido incluido al principio de esta Sección en el presente documento.
·
Promover la difusión y el conocimiento de las leyes ambientales vigentes,
empoderando a las comunidades a exigir a las autoridades municipales, estatales
y nacionales su cumplimiento, a favor de su derecho constitucional de disfrutar
un ambiente sano, seguro y ecológicamente equilibrado. La Asamblea Nacional, la
Fiscalía General de la República, la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría
General de la República, deben ejercer un papel importante en la divulgación de
la materia ambiental.
·
Impulsar el conocimiento sobre los deberes y derechos ambientales de los
venezolanos en todo el sistema educativo escolarizado, formal y no formal.
Conociéndolos y manejándolos, podremos impulsar un nuevo modelo de ciudadanía
más responsable en lo ambiental.
·
Insistir en la creación de la Jurisdicción Especial Ambiental dentro de la
estructura judicial del país, a los fines de reconocer el Derecho Ambiental
como disciplina autónoma y procedural, debido a su especial materia y en
atención a la tutela judicial ambiental efectiva, idónea y eficaz que aún
requiere Venezuela.
·
Promover la participación de las Fiscalías Ambientales en el desarrollo de
actividades que promuevan la conservación del ambiente.
10. Otras propuestas generales
·
Conciliar el potencial de nuestros recursos naturales con la capacidad para
generar riqueza, sin menoscabo de su abundancia y calidad, con un inmenso
potencial para propiciar la equidad y la justicia social.
· Mayor
compromiso para atender los problemas ambientales por parte de las entidades
gubernamentales, las ONG, el empresariado y las propias comunidades. Las ONG
ambientales deberían incluir dentro de sus actividades prioritarias la atención
a las comunidades para que se incorporen a la solución de estos problemas. Las
empresas privadas por su parte deben ampliar su inversión social a la atención
de los problemas ambientales locales, y no sólo en sus áreas de influencia,
además de adecuar su actuación a la ecoeficiencia y la producción limpia, según
sea el caso.
·
Propiciar una agenda de país a diez (10) años, sin excluidos ni excluyentes,
que identifique los problemas fundamentales en el sector ambiental para
proponer soluciones, en donde cada sector de la sociedad entienda y se
comprometa a cumplir con su responsabilidad en la solución. Si los problemas no
están suficientemente claros, las soluciones nunca llegarán.
·
Impulsar la organización social que promueva la atención de sus propias
necesidades, y mejore la crítica situación económica y social del país, superando
el centralismo en poder del Estado y el acceso a oportunidades en las que las
comunidades puedan gestar y confiar su propio desarrollo. No se trata de
repartir lo que hay, sino de aprovechar de manera sustentable lo que tenemos.
·
Retomar la realización de los congresos nacionales de conservación, en los que
diversos sectores presentan sus aportes en la gestión ambiental, bien se trate
de nuevos conocimientos, metodologías, acciones emprendidas o proyectos por
emprender.
·
Instar al Estado Venezolano, y eso incluye a todos los poderes, a la sociedad
civil, al sector productivo y a la academia, a que comprendan y valoren que lo
ambiental está estrechamente ligado a lo económico, lo social, lo cultural y
hasta a lo político partidista, porque un ambiente sano y limpio,
ecológicamente equilibrado, es la base de una sociedad moderna, con una calidad
de vida digna para todos sus ciudadanos.
·
Instar a los medios de comunicación social a crear y mantener espacios para la
divulgación y la difusión de conocimientos que puedan ayudar a formar en
valores y conductas cónsonas con la conservación ambiental y el desarrollo
sustentable.
·
Instar a la ciudadanía para que comprenda su rol en la gestión ambiental
moderna, donde cada acción trae una consecuencia o efecto positivo o negativo
sobre la salud y el ambiente de todos, recordando que si cada ciudadano revisa
sus comportamientos y adopta aquellos que sean más responsables, su actuación
podrá redundar en un entorno más sano y equilibrado para todos, con consecuencias
positivas para su región, país, y el planeta en general.